dimanche 29 mai 2016

DIMANCHE 29 MAI 2016

NO AL TTIP (STOP ULTRALIBERAL ABUSE OF PEOPLE )

SE PRETENDE INTRODUCIR EN EL TTIP UNA CLAUSULA ISDS PARA LA SOLUCION DE CONTROVERSIAS ENTRE INVERSORES Y ESTADOS QUE OTORGA A LAS GRANDES CORPORACIONES EL PODER DE CUESTIONAR DECISIONES DEMOCRATICAS (pueden demandar a los Estados ante tribunales PRIVADOS al margen de la legalidad nacional e internacional)

La propia Comisión Europea admite que el TTIP provocará perjuicios "prolongados y considerables" para los y las empleados y empleadas europeos. Estudios independientes prevén una pérdida de 600 000 empleos en la UE y de 3 500 a 5 500 euros al año por empleado/a.

La competencia normativa a la baja será una constante que anulará los derechos laborales que quedan.

Los servicios públicos en peligro de extinción
El TTIP facilitará más aún a las empresas privadas ser proveedores de servicios públicos como educación sanidad gestión de agua servicios sociales servicios de empleo etc

y será prácticamente imposible revertir la privatización de servicios públicos. Pasaremos de ser personas con derechos a simples clientes, y eso si cuentas con recursos económicos. Es el triunfo de la mercantilización sobre nuestras vidas


En el centro del debate sobre los contenidos del TTIP está acabar con las restricciones legales aun vigentes en Europa referidas a los organismos genéticamente modificados, la carne tratada con hormonas, el empleo de pesticidas, etc así como la ruptura con las leyes europeas que garantizan el etiquetado

Aumento artificial de la producción y por tanto imposibilidad de cumplir con la reducción del 20 por ciento de emisiones de Co 2 acordada por el protocolo de Kyoto

Nos tenemos que movilizar

CONTEMPORARY FLOOD

CONTEMPORARY FLOOD

Uno debe admirarse no por los que conoce vivos que son vanidad si creemos que su fascinación se escribe en la historia sino por los que conocemos por la historia al comprobar que es ahí donde se encuentra la vida

era una frase en recuerdo de estanislao zuleta

Buscaré una novia maoísta de verdad, joven, entusiasta. Le explicaré que aunque es inhumano privar de la sexualidad a cualquier ser humano, por la prisión o por el puritanismo, es decir que aunque es imperativo el vivir sexualmente, el tener pareja y realizar toda esa pantomima de la belleza de las sensaciones y de la comunicación de los sexos, una existencia que no tenga estudio y lectura, que consista, como ha consistido mi relación con Jeanne, solamente en el coito y la atormentada espera del coito, es una existencia consistente en locura, por ausencia del referente exterior que da el estudio. Así establecidos los postulados de la necesidad de estudio, mi relación con mi nueva pareja permitirá que yo recupere mis libros que quedaron en el taller de París y que ambos evolucionemos intelectualmente en vez de agredirnos verbalmente en la ya conocida espiral de la violencia. Asimismo el maoísmo de mi pareja hará que la violencia se emplee en la lucha de clases, única trascendencia productora de sentido en este mundo apocalíptico.


no deis más información que la que el otro necesite y si la puede necesitar es que la necesita, dice el super-ego o facha interior, un discurso donde cuenta más el tono imperativo que la coherencia semántica o intelectual de lo dicho

bueno, los no tan jóvenes musulmanes que por resorte manifestaron una turbia amenaza a mi paso delante del shawarma, volviendo tarde de una fiesta con mucho de santería, descamisado en púrpura carmín con un globo azul en la mano y acompañado de dos amigas colombianas, era el cumpleaños de Durenka, la viuda de Alaskoish, artista cantante ella misma, estaban como tantos pobres en Francia … disculpen lectores y lectoras, voy a empezar por el principio

Aunque todo fue un zhakt, un instante fugaz. Posiblemente su gesto de amenaza fue inconsciente, por reflejo. También pienso que no se trataba necesariamente de integristas, sino que por el contrario se podía pensar que fuesen fans disgustados o haters. Quizá artistas que se saben ignorados por mi perfil y que manifiestan celos profesionales.

Podría ser que mi ruptura con Marga fuese ya manifiesta a ojos del público y que se hubiese difundido como un drama en vivo, en la medida en que Margarita siempre insistió en que si con Rober había vivido su Margarita y el Maestro, conmigo se trataba de vivir Fausto y Margarita, que también era la obra representada en Sevilla por la Fura dels Baus y en la que ella había tenido algo que ver. Ahora bien, la obra de Marga era un drama social de dimensiones guerreras en el que los fans estaban implicados a fondo, un espejo de interpretación que sólo podía terminar en el linchamiento del uno o la otra. Quizás ese fue el respingo que pegaron los que estaban ya de larga tertulia en el shawarma, y nada más

Donde veo más vitalidad en cómic reciente es el Génesis de Robert Crumb

Espero que vas bien. En el cumple de ayer (fiesta flamenca, canto lírico decadente y zíngaro, santería afroamericana profunda que deja marcado) bailé mucho y me dijeron “Manuel, estás sembrao” y que volviese contigo. No sé qué quiere decir sembrao.

Yo no me acordaba de que Teresa, que vive con Durenka, nos había invitado a Margarita, a Louise y a mí al festejo que pensaba preparar para el cumpleaños de Durenka. A Marga le parecían maneras y conexiones propias del siglo XIX. Teresa solamente podía verse reducida a hacer figura de mucama, y su creatividad se volvía anécdota reprimida por el recuerdo. No fue así en la fiesta, Teresa efectivamente empezó por presentar con ceremonia, y oraciones, los platos que había cocinado, pero pronto su sensualidad de mujer negra imperativa e iniciada en su religión la presentó a mi sensibilidad como el eje de todo el movimiento colectivo de la fiesta, al margen del género de música que en cada momento se conjugó.

Durenka vestida de largo blanco, con un foulard encarnado, hacía pensar en una figura semi-yacente de Klimt o de Puvis de Chavannes, o de ciertas visiones de Gustave Moreau.

Los componentes de la fiesta hubiéramos dado cuerpo a un capítulo de Rostros Ocultos, la novela en ajedrez de Salvador Dalí. O a cualquier otra novela en ajedrez, como las que escribía el marido de Durenka.

Cuento, incluyéndome, dos pintores entre los personajes que se me presentaron abiertos. El otro pintor era Arturo que conozco desde los años noventa, habiendo una cierta sincronía entre la carrera de pintor de él y la mía al tiempo que una desconexión durante el tiempo entre los noventa y la actualidad.

Arturo supondría una sorprendente novela psicológica, es un personaje de Paul Auster, pero supera para mí el débil encanto de esas novelas, ya que conocerlo de verdad es participar de un estado similar a la excitación y a la perplejidad. Esa mezcla es en realidad la alegría de volverlo a ver, verlo tan guapo como siempre, tan glamouroso.

He incurrido en el defecto de cifrar en masculino la pintura, y hace mucho tiempo que no razonaba así, antes de conocer a la madre de mi hijo, pintora, que fue quien me avisó por teléfono de que la fiesta comenzaba. Casualmente yo estaba cerca de Pavaneras, cargando el móvil y en conferencia con Berthe, a la que necesitaba oír por sentir un gran vacío. El bocadillo de jamón que me comí antes ocupaba extrañamente ese vacío y yo sentía náuseas.

Puede ser que llevar jamón porcino en el estómago en un locutorio halal me sometiese a la cólera de Allah, pero solamente si una onda de esas entraba, porque el personal es cool siempre allí. Antes de subir Pavaneras, fue en el propio locutorio donde encontré un perfume de aceite de Argan para regalarle a Durenka.

Creo que había al menos otra pintora más (sin contar el hecho de que la festejada anfitriona es una gran pintora y que sus cuadros y los de su hijo Alexis agenciaban la decoración de todos los cuartos, además de los altares de santería con elementos budistas y velas encendidas en los que se puede pensar que Teresa tiene un ascendente )

De las mujeres guapas o interesantes me da pudor y me falta la fuerza para la descripción individual, me atengo al rasgo sufí de toda fiesta granadina.

Describir en panorámica la pamoison leve y trémula pero la mirada viva y despierta a todas las conversaciones, las nalgas de Teresa que accidentalmente permanecieron delante de mi cara, piel de ébano en la sombra o de roble pulido, veladas por muselina vainilla y que remiten a la parte indígena americana del mestizaje santero. Esas nalgas pequeñas y caderas breves de las indias que son similares también en Extremo Oriente. La figura ancestral de Teresa sentada al pie de la danza, con sus piernas ligeras, el tacón y la punta posadas, en elegante inmovilidad. La testa melenuda de cacique y chamana de la Orinoquía, la elasticidad de las mujeres negras.

Estuve durante toda la fiesta en conversación amigable con una colombiana de voz ronca, mujer angulosa, con los ojitos rayados y los pómulos marcados del sustrato indígena y el andar enérgico del trabajador americano en general, ella añadía a esos aires una gracia personal, un serio entusiasmo y una susceptibilidad leal. En algún momento estuvimos fuera tomando el aire en el Campo del Príncipe, ella y yo.

Encadenaba con encontrarme a Arturo en la ventana pasándome un canuto y nuestra comparación de nuestras ventas, él pagado en Francos Suizos y yo en Coronas Noruegas, para algunos de nuestros cuadros vendidos.

Esa misma acera y dos trentañeros que se creen adolescentes que suben a por mí desde que me ven y que me piden tabaco en tono insultante, yo busco y descubro que el paquete que guardo está vacío ya y les doy el cigarrillo que estaba fumando.

Sigue la panorámica sobre racimos de mujeres. Una mujer que besé, al despedirme, un poco más cerca de la boca que de cada lado de la cara. Bien plantada y con la actitud de alguien serio, leído, pero también galante y con estilo.

Un extraño drama. Un hombre guapo, sufí converso, es decir nacido cristiano, perteneciente a una de esas comunidades españolas de musulmanes estetas y posmodernos, llega entregando con precipitación varios regalos, posa para unas fotos de grupo, y va sintiéndose incomodado por algún trastorno, quizá digestivo.

El guitarrista flamenco y también cantante es un rubicundo gitano rubio de Algeciras, que vive en Granada, juvenil, nervioso, expresivo y mesmerizante.

El japonés, que creo que filmó alguna secuencia y que el mejicano sacó a bailar.

Estaba la albaicinera de nacimiento con su hijo y su marido, vestida de hada y maquillada con khol, unos ojazos y una voz en la que gime la hermana del alma, para mi oído educado en el mismo barrio.

Una cubana joven, estudiante de arte, de rasgos muy africanos, fina como silueta, sonrisa candorosa y atención a todo lo que se decía o se indicaba en una u otra parte.

Varias veces vino a hablarme un mejicano, arrugado de cara y de larga melena cana, era una combinación de Einstein y jefe indio. Filosofía chamánica con la que evidentemente siempre estoy de acuerdo. Empezó a dar golpecitos con un dedo en mi frente y en la de cada uno y cada una y se iba volviendo insistente. Finalmente encontró un sitio donde posarse y quedarse quieto y pensativo incrustado cerca de Durenka. Parecía una gárgola precolombina. No me importaría volver a platicar. Transmitía alegría, a pesar de su ciclo maníaco sin mayor gravedad aparente.

Había muchachas de treinta años, bonitas y tímidas, vestidas en general de vestidos negros, de nacionalidades diversas, la española incluida.

Llevo largo tiempo olvidando una cosa. La no concordancia radical del modelo político adoptado por el hijo de Durenka, Alexis, con el de algunos de nosotros, todo esto sobreentendido, nunca dicho, y que posiblemente hubiese sido un choque encontrarlo en la fiesta, y que el retraso de Alexis estuviese originado por esa discrepancia incómoda.


*

dimanche 8 mai 2016

Tintamarre (JULIBAGOO & MONTERO)


elemento visual de la colección MBM

Juliette

Coucou Manu !
Que tal ???


Manuel

allo Juliette ?


Juliette

L’agitation des hommes
sous les néons furibards
de la consommation

Manuel 

Nous n’avons jamais fait des douceurs de lait

Juliette

L’Ophélie, noyée 
Flottant au dessus 
De l’eau sarcastique

Manuel

L’eau phallique
d’Ophélie


Juliette

Dadame effarouchée 
par le trop noir corbeau
& son cri fauve

Le corbeau frise
la fenêtre 
Ombre et santé


Manuel

rumeur d’augures,
le calme, l’amour


Juliette

Volupté, turpitude,
langueur & pâmoison !

tes vers me font du bien


Manuel

c’est pareil pour moi
c’est mieux cela
c’est bien
que les passions de nos temps


Juliette

Rien ne serre
de courir, il faut
partir à point

La prudence & l’entente ferons alors commerce agréable


Manuel

je traverse une crise
de diskynésie (parkinson )
ça m’a pris au supermarché
après parler à une espagnole
maitresse d’école

Juliette

c’est terrible la dyskinésie et cela m’arrive chaque jour


Manuel

l’espagnole est venue voir mon atelier
c’est journée portes ouvertes
je refoule mon immense envie de…


Juliette

Ton immense envie de… quoi ?


Manuel

j’aimerais pas tarder à faire l’amour


Juliette

Je suis fidèle
plut-à la Bonne Fortune de retrouver un temple de tendresse pour Pascal…



Manuel

mais tu peux me prendre
ça ne gache en rien ton histoire


Juliette

Je reconnais bien là la spontanéité andalouse !!!


Manuel

depuis 2008
il a fallu du temps
pour être spontané


Juliette

De l’ambiguïté des poètes entre eux 

Crois-tu vraiment que cela soit possible ?


Manuel

faut pas s’en faire
ça n’a jamais marché


Juliette

Ma destinée est (peut-être), plus cruelle que tu ne penses…


Manuel

pourquoi ?


Juliette

Monde translucide
Tyrannie
De la transparence


Manuel

monde translucide
semence transparente de tous les cotés


Manuel

les colombes sortent de prison


Juliette

Ou bien
spermicides
affichés
sur les dents
des requins d’affaires


Manuel

requins d’affaires ou 
rouquins d’affaires ?


Juliette

REquins, loups de Davos, nous autres les agnelots de Sapho

Qu’est-ce qui ne marche pas ?
Les loups ou le jeu des agneaux ?

J’avoue, toi & moi
Délectables dialogues à la Beckett


Manuel

toi et moi, juliette et Godot


Juliette

On dirait
rassure-moi
ne sommes-nous pas entrés 
dans une tragédie ?
Ou bien, c’est l’acte I



Tu es un Globe (stellaire )
de couleurs
et de mots

Audaces, érotiques de l’huile
profondeur des idées

Relation homme femme
Noire & or
Sur fond de brouillard…

Ta plume fait silence d’un coup !

Manuel

je roulais un pétard


la force

Juliette

Volutes ambrées du kif consommé !

Paris ,
sempiternelle citadelle
organisée pour les plus forts


Manuel

choeur de voix noires en cluster
sur cadence


Juliette


Cadence élastique et coeurs vaillants !


Manuel

élastique le témoin de l’acte poétisé par l’impatience


Juliette

La grinta latina


Manuel

viva la grinta


Juliette

La Roue de la Fortune, les toreros défroqués, les prêtres suicidés,
tout un tintamarre à venir

ne serions nous pas plutôt hâtifs ?

Manuel

assoiffés par la fumée du poème


Juliette

Le speed date
poétique
est une bergère inoffensive


Manuel

Madame Guyon m’obsède, je ne pense
qu’a son conversatif de prière quiétiste
quand j’ai des rapports avec l’abbesse


Juliette

Rouges soifs de vers
Dadaisme réformé 
Acte 2

Soit l’acte 2
un dadaisme réformé, donc
Mais aussi des voeux pieux
suppots des sens


Manuel

c’est un si mauvais dicté
que celui de la grasse de l’agneau


Juliette

C’est joliement lettré Manu !


Manuel

symboles grecs si gentils entre ses dents du museau de ghazal

attaquant, le dieu aimant couleur de diamants
est la brillance spermatique de l’atome


Juliette

Ola hombre de pensiero


Manuel

ole  dit la cire des cierges espagnols, Eli disent les andalouses


Juliette

Somnolence diurne des fins de massacre


Manuel

Comedia et dromadaire des drames, numéro on sait, somnolence baroque


Juliette

Qu’est-ce à dire ?


Manuel 

La première conversation, allons

Trouble comme du jus de pomme est l’oracle du renonçant

Juliette


J’ai très envie de passer te voir
Mais mes jambes sont mortes
Comment puis-je faire ?


Manuel

je les couverai de baisers fidèles, je fais fondre l’ivoire


Juliette

Moi aussi te couvrirai, à mes heures, de vers
sapiens sapiens


Manuel

du baume, du calme


Juliette

De l’asphalte, pas ce soir


Manuel

l’asphalte c’est le caviar qui couvre la distance solicite et morose


Juliette

Tu sais Manu
mon énergie ces temps
est quasi impalpable (je
suis une morte vivante )

Splendide poète que tu es

Ne change pas
Les femmes ont voulu te changer
ça les a rendu hystériques

Tu es vivant / entier
et ton extravagance
n’est que le reflet
d’une lucidité
détournée



Fin

introduction au fragment de l'Evangile de Mélusine

  1. Manuel
    Permettez que j’abandonne pour un moment ma tenue de samouraï toréador, d’anarchiste maoïste andalou. J’aimerais entretenir la question du délire de prostitution à la manière délavée de Claude Maillard, oratrice, psychanalyste, poète, amie de Derrida, qui sait faire comprendre en profondeur avec la musique des oiseaux.
    Je comprends que s’attaquer physiquement à l’exploitation (en ce cas des femmes) doive se faire un peu comme dans le Bhaghavad Ghita, se détachant du mal qu’on fait à l’ennemi. Ebranler des hommes. A cela consiste toute révolution. Le délire s’arrête d’une claque. Et c’est fini de taper les femmes. C’est fini de donner des ordres. Et quand même il y a sexe dedans, il y a mystère plus que jamais auparavant.
    Un roman qui soit pas anodin n’est pas souhaitable. Ce que je fais n’est pas souhaitable. Quand je me mets à écrire je suis moi aussi en train de bombarder la ville martyre de Homs, ou je suis une bombe sur laquelle j’ai eu le cynisme d’écrire : “ça tombe bien”. A cause de mon éducation je me suis toujours enfoui devant les responsabilités, et en dernier ressort les plus profondes. Je me suis martelé un regard d’acier en me disant que la “laideur morale” n’était pas mon affaire, que je ne serais jamais touché et même j’ai fait en sorte d’exclure toute trace de sa présence de mon vocabulaire, ou de l’investir d’un masque de justesse, justice et je suis allé jusqu’à la consacrer en tant que sublimation.
    Chaque soir Marie fît goûter à Joseph, qui lui léchait la vulve, le sperme de Dieu coulant du creux de son vagin, les lèvres de lui serrés comme dans un pudique baiser. Cela lui fît répugnance d’après-coup, et il conçut la haine de ce sperme, mais la musique des sphères se fît entendre dans son esprit et l’apprît à persister sans violence.
    Evangile de Mélusine